martes, 1 de octubre de 2013

Habías dicho que ya no importaba

Y ella, aún con lágrimas en los ojos, seguía caminando. Se arrepentía de ver lo que había visto.


"No llores..." se lo repetía una y otra vez.


Ella pasaba con rapidez entre la gente sin levantar la mirada, quería llegar lo más lejos posible.


Las lágrimas comenzaron a derramarse sobre sus mejillas y empezó a bajar de velocidad. 


"Se suponía que ya no te importaba..."