Lluvia

Era época de sequía, no había llovido en meses, ese ambiente seco me deprimía.

Seguía pensando en él, seguía lastimándome a mí misma. Lo veía y mi corazón aún se aceleraba.

Un día, me había cansado de sentirme así por él, y mientras veía las estrellas pensé: "Lo olvidaré hasta que llueva". Al otro día, hubo una tormenta.

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Me preguntó si ya lo había olvidado, sonreí, me di la vuelta y empecé a caminar... De repente, las lágrimas se acumulaban, comencé a ver todo borroso, me detuve. Me quedé parada debajo de unos árboles frondosos. Alcé la mirada, pequeños rayos de sol podían colarse entre las hojas, las lágrimas comenzaron a caer, sin embargo, mi sonrisa seguía ahí.

...

-¿Es un delito recordar esas cosas?

-No, pero sólo te lastimas.

-Pero es algo que me hizo muy feliz.

-Sí, pero date cuenta de que no volverá a pasar.

-Lo sé

Aún con sentimientos

¿Cuánto eres capaz de extrañar a alguien?

¿Cuánto eres capaz de hacer para que esa persona regrese?

Los días pasan y sigo tratando de convenserme a mí misma a olvidarlo, pero no lo hago.  No importa cuántas cosas malas hay de él o en él, sigo en el mismo error.

Errando sin parar, como siempre.

Los contactos visuales siguen pasando... ¿En qué estará pensando?

Su vida es completamente diferente a cuando aún estábamos juntos, y la verdad ya no sé nada de él.

Al tener él y yo amigos en común, me siento tentada a preguntarles cómo está, si es feliz. Pero no lo hago, no quiero que sepan que aún siento algo por él.

Él fue un amigo, nunca fue algo más... Sin embargo, lo sigo queriendo, me fue inútil querer olvidarlo, nunca lo hice... O más bien, nunca quise.

¿Por qué sigo enamorada de él? ¿Por que no quiero olvidarlo? Esas son unas de una infinidad de preguntas que aún sigo sin poder responder.

Me cuesta tanto tratar de no pensar en él, siempre sueño que volvemos a estar juntos... Algo que no pasará.

Sigo extrañándolo, pero... Ya no puedo hacer nada. Mi cajita musical a dejado de funcionar para siempre.

Cajita musical

Imagina que tienes una cajita musical. Es uno de tus objetos más preciados y te encanta escuchar su musiquita. Ahora, ¿qué harías si un día, se descompone? ¿La tiras a la basura y compras una nueva, o tratas de repararla?

Si tan sólo él supiera...

 

Si tan sólo él supiera que mis cambios de ánimo eran provocados por él. Que por él, mi inseguridad crecía día a día.

Él ha sido la única persona por la que he llorado demasiado... tal vez porque era la única persona con la que quería estar.

Con él viví cosas que nunca creí vivir... cosas que tengo miedo de que no se puedan repetir.

Él entró de la nada en mi vida, la cambió por completo.

Si tan sólo él supiera que lo quise como nunca he querido a alguien. Que mi más grande miedo era perderlo, que sin él, mi vida se volvía gris.

Si tan sólo él supiera que cada día que estaba junto a él, una alegría inmensa invadía el corazón, él alegraba mi vida. Cada momento que estaba junto a él, yo quería parar el tiempo, quería estar con él.

Cómo amaba a ese tonto.




Amaba a ese tonto... 

Pensamiento de adolescente... Falta de identidad, Falta de autoestima

 He llegado al punto de tener miedo de ser feliz.

Tengo tanto miedo de ser feliz... Siempre que lo soy, pasa algo malo.

Siento que si soy feliz, el universo se pone en mi contra para destruir mi felicidad.

Tengo tanto miedo.

Cada día me siento cada vez más sola. Desespero y lastimo a los que me quieren... pero casi nunca están cuando los necesito.

Como en navidad y en año nuevo, decidí no enviar mensajes esa vez, sólo para ver si se acordaban de mí... Pero no... Estuve toda la noche revisando mi celular... Ningún maldito mensaje... ninguno... Y sí, sé que es algo muy tonto y simple... pero... sólo quería ver que pasaba... efectivamente no pasó nada.

Los días pasan y sigo en lo mismo. Ya no sé quién soy... ya no sé nada.

Había logrado estar casi dos meses sin depresiones, sin llorar... creí ser feliz, creí estar bien conmigo misma. Empecé desde cero, me alejé de los que me hacían daño, no me importaba lo que dijeran de mí, ya era feliz, mis ataque de risa diarios habían regresado, pero... se acabó, como dije, parece como si el universo se pusiera en mi contra... o mejor dicho, las personas se ponen en mi contra para destruir mi felicidad... claro, sin darse cuenta... o tal vez sí.

Otra vez, perdí mi rumbo... me desvié de mi camino.

Me molesta no poder cambiar, seguir en las mismas, errar como siempre.

Creo que ya no tengo remedio, ya no sé qué puedo hacer... siento un vacío inmenso dentro de mí. Las ganas de llorar las tengo atascadas... no se quieren ir.

He llegado a odiarme, cometo demasiados errores, lastimo a quien no debo, dejo ir a quien debería quedarse, dejo que se quede quien me lastima,  pierdo a quien necesito... Me convertí en la persona que tenía miedo de convertirme. Me convertí en la persona más imperfecta.

Sé que no debo quejarme, debo sonreír para aparentar ser feliz... ponerme de nuevo ese disfraz, que por un tiempo fui yo en verdad...  todo para no causar problemas... me cansé de molestar a los demás. Sé que a veces mis problemas son simplemente estúpidos, yo misma me doy cuenta, pero me encanta como esos problemas desesperan a los que me rodean. Por eso empecé a guardarme todo, para evitar lo anterior.

Debo esforzarme para que nadie note mi tristeza, ya que soy de esas personas que su semblante cambia muy drásticamente y es demasiado notorio.

Debo esforzarme para dibujar esa sonrisa en mi cara... para evitar problemas.